La concentración es un bien escaso en los últimos tiempos. Hay muchas cosas a nuestro alrededor pretendiendo captar un poco de nuestra atención. Para muchas empresas, industrias, etc., nuestra atención vale dinero. No importa la edad. Mucha publicidad agresiva va dirigida hacia los niños para orillarlos a que te hagan un drama en la caja del supermercado.
Los mejores publicistas trabajan para las empresas más grandes. Egresados de las mejores universidades diseñando formas de poner en tu mente ese producto.
Así las cosas en el mundo. Sin embargo hay que decir que todavía podemos controlar nuestro pensamiento. Digo todavía, no se si en el futuro nos inserten publicidad en el cerebro. Por ahora podemos aprovechar nuestra concentración de la mejor manera.
La concentración cambia durante el día
No todas las tareas que realizamos durante el día (o la clase de taekwondo) requieren el mismo nivel de concentración. Y no puedes mantener una concentración elevada durante todo el día, no importa cuanto café tomes. Nuestra concentración tiene límites.
¿Tus hijos no se concentran en la tarea? ¿Tus alumnos no se concentran durante la clase? ¿Estas desesperado? No te preocupes, como veremos en el artículo no es tu culpa (al menos no es solo tuya). Pero esto no quiere decir que no puedas hacer nada al respecto.
Aquí te escribiré algunas estrategias que puedes utilizar tanto en tu casa con tus hijos como en la clase de taekwondo con tus alumnos. Y bueno, si tú atención también es escasa (como la mía) también los puedes utilizar en ti mismo.
Monitorear la atención
Es lo que recomiendan los gurús de la productividad. Observando a tus hijos y tomando notas puedes encontrar en que momentos del día están más concentrados y puedes planificar las tareas que requieren más de este preciado bien. Por ejemplo las ecuaciones de segundo grado.
Estoy seguro que las tareas de tus hijos no requieren de los mismos niveles de atención. Seguro hay tareas que llevan más tiempo de elaboración pero menos concentración, por ejemplo colorear un mapa.
En cambio hacer una lectura de comprensión puede ser más complejo para un niño. Ahí lo tienes, tendrás que encontrar el momento adecuado para que la atención sea máxima a la hora de la lectura.
En el caso del taekwondo aprender una técnica nueva requiere más atención que repetir una que ya se domina. Seguro que hay un momento en la clase en la que la atención es máxima.
Motivar
La motivación esta totalmente relacionada con la concentración. ¿Por qué me voy a concentrar en el algo que no me interesa? Mi cerebro encuentra estímulos más interesantes que encontrar equis.
Si las ecuaciones de segundo grado no motivan a tú hijo su capacidad de concentración no será tan buena. Encontrar una buen motivo puede convertir un fracaso en éxito.
Si una tarea no es lo suficientemente motivante conseguirás muy poco por muchas horas que le dediques. Piensa en las escuelas, los niños pasan horas ahí y uno de los efectos que más se consiguen no es que los niños aprendan, sino que odien aprender.
Menos es más.
No es lo mismo levantar una vez al día una carga de 100kg que levantar 100 veces al día una carga de un 1kg. ¿Qué es más demandante? ¿Qué genera más adaptaciones.
Yo a veces traduzco esta frase al taekwondo diciéndole a mis alumnos, ganas más haciendo una forma ejecutada con tu máximo esfuerzo que cien veces hecha con flojera.
Los viejos maestros coreanos sabían esto. En su libro “Karate Coreano” Duk Sung Song, uno de los pioneros del taekwondo en Estados Unidos explica que es suficiente con hacer 10 repeticiones por cada movimiento.
Si los equipos profesionales de futbol tienen a sus jugadores todo el día en el club, ¿Por qué no entrenan todo el día? Por qué entrenan al máximo, física y mentalmente.
Minimizar los errores por cansancio
Uno de los errores que más cometía cuando comencé a dar clases era pretender que los niños aprendieran al mismo nivel toda la clase. Ahora me enfoco sólo en pequeños momentos de la clase para aprender cosas nuevas.
Cuando la atención comienza a decaer comienza a aparecer el error. Entrenar (o hacer tareas) cometiendo errores por cansancio o fatiga equivale a perder el tiempo.
Equivocarse está bien cuando aprendes del error y lo utilizas para mejorar. No cuando te equivocas en tareas que dominas por el simple hecho de que estas cansado.
El ambiente
Siempre es mejor conseguir un clima de pocas distracciones. Un lugar adecuado para que los niños realicen la tarea, lejos del ruido de la casa es muy conveniente.
Si la casa es pequeña quizás tú también tengas que hacer pequeños sacrificios. Por mucho que la tarea se de tu hijo y no tuya si tu te pones a ver la tele mientras el trabaja ¿a qué crees que le pondrá más atención?
Puedes aprovechar ese momento del día para trabajar un poco, leer, planear, o incluso apoyar a tus niños con su tarea.
¿Cómo obtener la máxima atención en tus niños?
Tendrás que saber en que momento del día tus hijos están más concentrados. También se tiene que hacer una análisis de las tareas que van a realizar para saber cuales se harán primero (fíjate que al mismo tiempo tus hijos estarán aprendiendo Gestión de Proyectos) y cuales después.
Esto no tiene que llevar mucho tiempo, solo es tomar decisiones. Una vez sumergidos en la tarea tienes que saber qué es lo más importante. Si tu niño está haciendo sumas de fracciones, concéntrate en la suma de fracciones y no en si los números le salen feos.
Si crees que tú niño tiene que hacer sus números más bonitos. Pues eso será otra tarea para otro día. Es mejor concentrarse en una sola cosa.
Recuerda que la concentración es escasa. Así que la tarea que requiera máxima atención no deberá de ser muy larga.
A continuación explicaré algunas cosas que hago en la escuela de taekwondo para aprovechar la atención. Si no te dedicas a enseñar taekwondo quizás no encuentres la parte siguiente tan interesante y no es necesario que la leas.
En la clase de taekwondo…
Utilizo diferentes estrategias. Cuando hay algo que requiere mucha atención casi siempre lo hago al inicio de la clase. Aprender una nueva forma o una técnica. En general los niños comienzan la clase con la mente más fresca.
Trato de enseñar las formas de manera individual. Eso repercute en un uso del tiempo mucho más productivo. Aprenderlas de manera grupal quiere decir que tendrás a unos niños aburridos repitiendo algo al ritmo de otros niños.
Ya que los alumnos “aprendieron” el poomsae es más fácil perfeccionarlo en grupo y poner el foco en pequeños detalles. Esto me recuerda otra estrategia que utilizo en con niños.
Primero “aprender”, después pulir…
Primero me enfoco en los movimientos y pasos, y después en la técnica. Antes cometía el error de tratar de que los niños fueran aprendiendo el poomsae y al mismo tiempo que lo ejecutaran de una forma correcta.
Entonces en lo que explicaba la forma correcta de hacer una posición, ya había perdido su atención para aprenderse los movimientos de la forma. Era muy lento enseñar de esa forma.
La mirada es muy importante
Cuando se hace la posición de “chumbi” o listo. La mirada debe de ir al frente y no debe de divagar. Si los ojos están viendo para otro lado es posible que ya no tengas la atención de tu alumno.
En la clase de taekwondo trato de fomentar momentos en los que todo el foco de la atención esta en una sola cosa. No puede ser toda la clase porque aburriría a mis alumnos.
Pero cuando tengo toda su atención trato de aprovecharla al máximo.
Conclusión
La atención es un bien escaso y debemos de administrarla adecuadamente. No la podemos desperdiciar en tareas que no la requieren.
Se tendrá que definir qué es a lo que necesitamos ponerle más atención y actuar sobre eso. Poner el foco. Pruébalo y me cuentas como te va. Hasta el siguiente post el próximo miércoles.